martes, 16 de septiembre de 2008

MentiraMutua

Es fácil darse cuenta que las cosas andaban mal, cuando las peleas, los gritos y los portazos se vuelven pan de cada día.

Y la rutina, maldita rutina... pensar que alguna ves fuimos felices, la verdad es que recuerdo muy poco de eso, paso hace tanto tiempo.

Con el tiempo termine durmiendo al lado de un mueble, un mueble frío e insensible, un mueble al que no le importaba si sus hijos tenían todo para el colegio, un muble que llegaba tarde para no estar con su familia.

Deje de preocuparme cuando asumí que esto seria así aunque no quisiera, yo sabia que tenías a otra, yo tenía otro ¿Qué mas? Solo quedaba fingir que éramos felices

Fingir como lo hacemos para cada comida de la empresa, fingir delante de los vecinos, fingir como lo hicimos durante años frente a los niños, que no entiendo como no se dieron cuenta, fingir con esa sonrisa falsa que nos sabemos de memoria y así nos volvimos en unos verdaderos profesionales en mentir

Sabíamos desde el principio que no iba a funcionar lo nuestro, casarse por obligación, como en la edad media, una verdadera tortura. Sí, estaba embarazada, pero no estábamos en el siglo XV, bueno quizás si para mis padres.

Seis meses llevábamos de casados y nació la Paula, obvio todos creían, o quisieron creer, que la bebe era prematura, auque la guagua era enorme… en fin nadie dijo nada.

Ni tu dijiste nada, te importo poco que naciera tu hija, estoy segura que siempre te lamentaste porque fue todo por culpa de una calentura de una noche.

Dos años después nace Nicolás y con eso pensé que ibas a cambiar, claro como para traerlo al mundo nadie te obligo, no entiendo porque fui tan entupida, seguiste igual de frío y rígido.

Después de eso deje de llorar, deje de lamentarme, pase por alto que tuvieras dos o tres amantes… Cuide a los niños, trate de darles ese cariño que nunca les diste, pero los niños crecieron, maduraron y se fueron, dejándome un vacío, dejándome vacía

Así, sola, no sé porque, seguí tus pasos y me volví la esposa mas infiel del barrio, como si las otras cartucha son le pusieran el gorro a sus maridos, y reconozco que no lo pase nada de mal.

Tú hacías lo mismo con tus otras mujeres ¿o no?

En fin... igual me aburre dormir con un ser humano que ni siquiera te saluda y que solo te da un beso en la mejilla cuando esta frente a los colegas.

Hablando de colegas… hoy vienen a comer a la casa, otra tortura más

Diablos suena el pestillo de la puerta, a fingir otra ves

3 comentarios:

Tomás Bradanovich Gómez dijo...

see, siempre he dicho lo mismo, la rutina termina degenerando la cordura, y termina por destruir a mucha gente... :)

Kiltra :D.- dijo...

oh csm me gustan tus escritos washonaa son tan reales... es cuatico.. voy leyendo y voy imaginando todo paso a paso lo que escribes, teni cualquier talento, de verdad :)te quiero alicia :B

Anónimo dijo...

hahaha
Como que...
Uni piensa altiro en sus papas, o yopor lo menos lo hago. Y de repente esa misma wea losmata.
Mejor estar solo? No,la rutina de estar solo es aun peor. Incluso la rutina de no tener rutina mata.
Lo mejor es no tener. Y cuando lo tengas, aprovechalo por que si lo guardas nuevamente caes en rutinas autodestructivas.
Por eso justifico a la gente que no puede tener plata en sus manos por que la gasta :A xD

Te amo preciosa... Mas que tu a mi por que yo soy mas rudo y mi blog es mas feo y tosco y por ende varonil que el tuyo (que esta precioso, buen gusto. Si, tienes bien buen gusto para varias cosas :ninja: xd)...

:) (L)